Guayana es tierra de retos
para la Venezuela de hoy.
Prácticamente
aislada del resto del país desde la época de la Conquista (a pesar de su innegi
importancia histórica) debido a las casi
insuperables dificultades de acceso que siempre ofrecic exuberancia
selvática, hace apenas treinta o cuarenta años que su incorporación al
desarrollo emp a ser una tangible realidad.
En momentos en que los países industrializados
exploran nuevas fuentes de energía, cuan mundo enfrenta los
problemas de superpoblación, de escasez de espacios naturales y de
destroce del medio ambiente que caracterizarán, entre otras
cosas, el presente siglo para generacio venideras, Guayana
abre sus puertas al futuro como un reservorio casi increíble de potencialidal
capaz de proyectar a Venezuela con pie firme en un mundo en que la
industrialización planificad motor innegable del progreso.
Guayana es, en los actuales momentos, eje del
desarrollo de las industrias básicas del hierro y aluminio,
centro generador de energía hidroeléctrica (no contaminante) de enormes
proporcior capaz de abastecer demandas muy superiores a las ya exigidas
por su elevada producción industria a la vez, extenso
territorio casi inhabitado, capaz de albergar una creciente población
transforman de recursos, que se mantendrá en contacto
productivo a través de la red fluvial del Orinoco, una dE mayores
del mundo, con conexiones hacia el Atlántico (América y Europa)
y otros importantes río: Suramérica.
Fuente abundante de recursos mineros,
forestales, hidráulicos, centro de industrializac creciente
y de
diversificación de la economía petrolera, zona de extensas vías de comunicac económicas y confiables... ¿Qué más
es Guayana?
En un mundo que ve disminuir peligrosamente
sus formas de vida no humanas, afrontando extinción de un gran
número de especies de flora y fauna por la actividad industrial y económica
hombre,
la Región de Guayana es uno de los últimos reservorios de vida salvaje del
planeta y importante
pulmón vegetal -junto con la Amazonia- que todavía ayuda a contrarrestar
la crecie contaminación
atmosférica mundial.
Grandes espacios de Guayana se hallan
protegidos por la legislación venezolana coi actividades
destructoras del ambiente; y a la explotación agrícola y forestal
planificada dei agregarse las leyes contra la contaminación,
de estricto cumplimiento por parte de las empresas d Región.
Por último, Guayana posee un valioso
patrimonio antropológico.: la existencia de la ma población
indígena del país, conformada por diversas etnias, cuyo contacto con la
sociedad urb debe motivar la mutua comprensión y la
colaboración al logro de objetivos comunes y mejoramiento del nivel de vida en un clima de
respeto de los respectivos valores culturales.
Estos son los retos que nos aguardan hoy que
Guayana ha dejado de ser, en gran parte, el territe aislado
e incógnito que fue hasta hace pocas décadas: la incorporación plena de la
Regiór desarrollo del país, con el adelanto
tecnológico que confiera a Venezuela una firme posic económica,
conservando al mismo tiempo los recursos naturales y logrando
la integración armór del hombre de la sociedad
industrial con el habitante autóctono. Retos difíciles que debemos, obstante,
rebasar, ya que de su superación depende no sólo el
bienestar de nuestra gente y nue futuro económico como
nación, sino aun nuestra propia supervivencia como especie.
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